SAN JUAN — El artista puertorriqueño Jaime Fournier celebra el renacimiento de su carrera como pintor con su nueva exhibición “Desolvido”, que abre este jueves, 25 de octubre, en la Liga de Arte de San Juan. Con una carrera artística que abarca 35 años, Jaime Fournier emerge nuevamente en el mundo del arte con una pasión renovada. La nueva exhibición del artista desafía las convenciones y etiquetas tradicionales del arte contemporáneo, invitando a descifrar sus enigmáticas y provocativas creaciones.
Su inquebrantable búsqueda de autenticidad y su capacidad para navegar entre estilos desafiantes y técnicas innovadoras son características de su trabajo. Muestra de ello se aprecia en esta muestra, donde recurre a una amalgama de colores, formas, signos y símbolos. En su serie "los candelabros", por ejemplo, reta las reglas establecidas para explorar simbolismos únicos que nacen de su psiquis, capturando la esencia de su entorno. El bote, la montaña, el mar, la cruz y la madera son elementos recurrentes en su obra, anclándolos a su paisaje. Su trabajo, para el que utiliza herramientas que incluyen cuchillos, lápices, correas, cábalas, serpientes y raíces, es testimonio de supervivencia enfrentándose a la presencia eterna de la muerte.
“Esta propuesta recoge mi obra de los pasados dos años (la cual aún yo mismo resisto catalogar). Aunque hay temas y trazos, composiciones, ¿botes? recurrentes, quiero pintar como el autodidacta que soy, como el lector que soy, como el arquitecto que soy, como el amante del mar que soy, como un loco por el arte, como puertorriqueño que soy, por lo que eso significa hoy y por lo que pueda significar mañana. Busco hacer el mapa de mi sendero, concluir la ruta y poder guiar a otros (una vez yo no sea). Como el que duda y quiere tenerlo todo”, expresó el artista sobre esta nueva muestra en la que propone una receta propia para dar sentido a su búsqueda temática, estilística y estética donde, como dice, no hay una sola respuesta. “A medida que pinto, todo parece complicarse. ‘Desolvido’ es el antídoto al espectro caótico que supone el ser artista entre tantas opciones. Porque yo quiero tenerlo todo. Y recuerda, tú también puedes tenerlo todo”, agregó.
Marilú Carrasquillo, directora ejecutiva de la Liga de Arte de San Juan, destacó que acoger esta nueva exhibición de Jaime Fournier no solo es motivo de alegría para la entidad que dirige, sino que también es muestra del gran compromiso que ha tenido esta organización con los artistas puertorriqueños desde su fundación hace 55 años. “Recibir a Jaime Fournier en esta nueva etapa de su carrera es para la Liga de Arte de San Juan motivo de gran satisfacción. Hemos sido testigos de su desarrollo como artista y tenerlo en nuestra sede, con todo un camino andado, es definitivamente motivo de celebración”, compartió Carrasquillo.
“Desolvido” abrirá sus puertas este jueves, 25 de octubre, en el Espacio Betsy Padín, en la Liga de Arte de San Juan. La muestra, que estará abierta al público hasta el 30 de noviembre, ofrece a los espectadores la oportunidad única de sumergirse en el mundo vibrante y provocativo de Jaime Fournier, un artista cuya pasión y dedicación continúan inspirando a diversas generaciones. La Liga de Arte de San Juan es una institución educativa sin fines de lucro comprometida con la enseñanza de las artes plásticas y el apoyo a los artistas del país. Su sede está ubicada en la calle Doctor Francisco Rufino de Goenaga, frente a la Plaza del Quinto Centenario, en el Viejo San Juan. Para más información, puede comunicarse al (787) 725-5453 o visitar la página web de la Liga de Arte, ligadeartesj.org. También puede visitar las redes sociales, @ligadearte en Facebook e Instagram.
SOBRE JAIME FOURNIER
Artista puertorriqueño, nacido en San Juan. Su carrera artística comenzó en Nueva York a principios de los años 80 durante el frenesí del neoexpresionismo, la transvanguardia y los nuevos pintores neofigurativos de la metrópoli. En la década del ochenta participó de la colectiva “MUJERES”, en la desaparecida Galería Martin Molinary. De vuelta en San Juan –luego de una estancia en Barcelona– formó parte de la escena artística underground con MSA, exponiendo en las galerías Luigi Marrozzini y Botello. En 1989, ganó el primer premio del Concurso de Arte AVCO con su obra “Ignaciana”, que forma parte de la colección permanente del Museo de Arte Contemporáneo de Puerto Rico (MAC). Otra obra suya, “Los que curvan mi osamenta”, fue adquirida por la sección LATAM de la Organización de los Estados Americanos en DC en 1992. Ha participado en varias exposiciones individuales y colectivas por invitación, incluyendo las Bienales de Santo Domingo, Cuenca y Mónaco. Después de dos décadas de trabajar herméticamente y en silencio, sin galerías, marcas, mecenas ni dogmas, Jaime está de vuelta en el ámbito público. Sus pinturas recientes son su nueva narrativa.
Su inquebrantable búsqueda de autenticidad y su capacidad para navegar entre estilos desafiantes y técnicas innovadoras son características de su trabajo. Muestra de ello se aprecia en esta muestra, donde recurre a una amalgama de colores, formas, signos y símbolos. En su serie "los candelabros", por ejemplo, reta las reglas establecidas para explorar simbolismos únicos que nacen de su psiquis, capturando la esencia de su entorno. El bote, la montaña, el mar, la cruz y la madera son elementos recurrentes en su obra, anclándolos a su paisaje. Su trabajo, para el que utiliza herramientas que incluyen cuchillos, lápices, correas, cábalas, serpientes y raíces, es testimonio de supervivencia enfrentándose a la presencia eterna de la muerte.
“Esta propuesta recoge mi obra de los pasados dos años (la cual aún yo mismo resisto catalogar). Aunque hay temas y trazos, composiciones, ¿botes? recurrentes, quiero pintar como el autodidacta que soy, como el lector que soy, como el arquitecto que soy, como el amante del mar que soy, como un loco por el arte, como puertorriqueño que soy, por lo que eso significa hoy y por lo que pueda significar mañana. Busco hacer el mapa de mi sendero, concluir la ruta y poder guiar a otros (una vez yo no sea). Como el que duda y quiere tenerlo todo”, expresó el artista sobre esta nueva muestra en la que propone una receta propia para dar sentido a su búsqueda temática, estilística y estética donde, como dice, no hay una sola respuesta. “A medida que pinto, todo parece complicarse. ‘Desolvido’ es el antídoto al espectro caótico que supone el ser artista entre tantas opciones. Porque yo quiero tenerlo todo. Y recuerda, tú también puedes tenerlo todo”, agregó.
Marilú Carrasquillo, directora ejecutiva de la Liga de Arte de San Juan, destacó que acoger esta nueva exhibición de Jaime Fournier no solo es motivo de alegría para la entidad que dirige, sino que también es muestra del gran compromiso que ha tenido esta organización con los artistas puertorriqueños desde su fundación hace 55 años. “Recibir a Jaime Fournier en esta nueva etapa de su carrera es para la Liga de Arte de San Juan motivo de gran satisfacción. Hemos sido testigos de su desarrollo como artista y tenerlo en nuestra sede, con todo un camino andado, es definitivamente motivo de celebración”, compartió Carrasquillo.
“Desolvido” abrirá sus puertas este jueves, 25 de octubre, en el Espacio Betsy Padín, en la Liga de Arte de San Juan. La muestra, que estará abierta al público hasta el 30 de noviembre, ofrece a los espectadores la oportunidad única de sumergirse en el mundo vibrante y provocativo de Jaime Fournier, un artista cuya pasión y dedicación continúan inspirando a diversas generaciones. La Liga de Arte de San Juan es una institución educativa sin fines de lucro comprometida con la enseñanza de las artes plásticas y el apoyo a los artistas del país. Su sede está ubicada en la calle Doctor Francisco Rufino de Goenaga, frente a la Plaza del Quinto Centenario, en el Viejo San Juan. Para más información, puede comunicarse al (787) 725-5453 o visitar la página web de la Liga de Arte, ligadeartesj.org. También puede visitar las redes sociales, @ligadearte en Facebook e Instagram.
SOBRE JAIME FOURNIER
Artista puertorriqueño, nacido en San Juan. Su carrera artística comenzó en Nueva York a principios de los años 80 durante el frenesí del neoexpresionismo, la transvanguardia y los nuevos pintores neofigurativos de la metrópoli. En la década del ochenta participó de la colectiva “MUJERES”, en la desaparecida Galería Martin Molinary. De vuelta en San Juan –luego de una estancia en Barcelona– formó parte de la escena artística underground con MSA, exponiendo en las galerías Luigi Marrozzini y Botello. En 1989, ganó el primer premio del Concurso de Arte AVCO con su obra “Ignaciana”, que forma parte de la colección permanente del Museo de Arte Contemporáneo de Puerto Rico (MAC). Otra obra suya, “Los que curvan mi osamenta”, fue adquirida por la sección LATAM de la Organización de los Estados Americanos en DC en 1992. Ha participado en varias exposiciones individuales y colectivas por invitación, incluyendo las Bienales de Santo Domingo, Cuenca y Mónaco. Después de dos décadas de trabajar herméticamente y en silencio, sin galerías, marcas, mecenas ni dogmas, Jaime está de vuelta en el ámbito público. Sus pinturas recientes son su nueva narrativa.
Comentarios
Publicar un comentario