Diana Dávila, un viaje a la sensibilidad del ser

Por Edwin Velázquez Collazo/ artista, curador y crítico de arte (AICA-USA / Asociación Internacional de Críticos de Arte de Estados Unidos)

Una vez más me dirijo a esas nuevas búsquedas de enfrentamientos como mi ser, ver, percibir y disfrutar de una experiencia con el arte. Encuentro entonces la reciente propuesta creativa de la artista y ceramista Diana Dávila en la Liga de Arte de San Juan.

Luego de disfrutar el acogedor patio interior de la institución me deslizo hacia la Galería Delta Picó, considerada una de las más importantes del país, para sumergirme en las exquisitas piezas de esta gran creadora del barro.

La exposición con un agradable montaje nos hace partícipe de esos espacios meditativos de la artista, obras cuidadosamente creadas y de una sublime belleza que nos dan esa percepción de estar inmersos en la tranquilidad del fondo del mar. 

Formas curvas y movimientos que dan esa sensación de conchas, almejas, caparazones, cobitos en fin un mundo marino de moluscos que nos lleva a meditar o sentir un fluir de energías diversas. 

Dávila juega con nuestra memoria así como lo hace con el barro, moldea nuestros sentidos con el color azulado y la textura de las mismas hasta llevarnos en un sublime viaje de una exquisita  marea visual.

Así como el mar nos transmite tranquilidad y relaja nuestra mente la obra de esta gran artista nos invita a desconectarnos con este rico chapuzón creativo para dirigirnos hacia esa gran inmensidad de nuestro ser. 

Nota: La exposición “Pausa y Despausa” de Diana Dávila se presentará hasta el próximo 2 de diciembre en la Galería Delta Picó  de la Liga de Arte en el Viejo San Juan.