Vista de la apertura en la exposición de arte erótico “Barrio Chino”
Por Edwin Velázquez Collazo
Fui invitado como artista plástico a participar de una de las
pocas exposiciones sobre arte erótico que se celebran en la isla anualmente,
son muy contadas. Bajo el sugestivo título “Barrio Chino...Los placeres
sexuales no nos llevarán al infierno“esta muestra colectiva presentaba obras de
los artistas: Cao, Carmen Mojica, Elena Méndez, Cecile Molina-Machargo, Eduardo
Cabrer, Frances Pico, Hubert Caño, Mayra Molinari, Miguel Sacarello, Pablo
Santiago Romera, Raphael Rodríguez III, Norberto Morales, Frus Charoy, Jaime Rodríguez
Crespo, Fabian Wilkins y este servidor.
Vista de la exposición de arte erótico “Barrio Chino”
Vista de la exposición de arte erótico “Barrio Chino”
Una gran noche entre chinos, roces, abrazos y risas ante el
disfrute de una buena y diversa exposición de arte en rica camaradería artística
de un lleno total en apoyo y asistencia para este proyecto inicial. Donde pudimos
apreciar un arte erótico interesante por la variedad de medios que
allí se exhibía y por la no censura de lo que allí cada artista presentaba. Desde
un erotismo sublime e insinuante hasta uno directo y crudo dentro de una desnudez sensual o genital.
Vista de la exposición de arte erótico “Barrio Chino”
Vista de la exposición de arte erótico “Barrio Chino”
Vista de la exposición de arte erótico “Barrio Chino”
Una noche del mes del amor, por seguir los clichés publicitarios,
donde la sensualidad del arte se expresó sin limitaciones ni restricciones en
una época donde se está censurando obras de grandes maestros del arte en museos
y espacios alrededor del mundo.
Allí estábamos el pasado viernes, 23 de febrero en la parada
15 reunidos los artistas y el público amante del arte erótico, lugar que
no solo fue el centro discográfico del país sino también el lugar preferido de
la prostitución masculina y femenina de San Juan en una época, en el Espacio 730 de la Calle Cerra o mejor
dicho el Estudio de Frances Picó, una gran artista y amiga que admiro mucho no
solo por su obra sino también por apoyar las locuras de sus compañeros artistas
al convertir su taller de trabajo por un fin semana en una “Pop Up Gallery” alternativa,
sin lugar a duda una excelente idea y esperamos que no sea la última vez. Porque
Santurce es sensualidad, erotismo y barrio chino.
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