Obras de los artistas puertorriqueños Julián Ruiz y Diego Romero al Congreso de Estados Unidos


Según  la Dra. Gretchelle Dilán, directora  “La Colección” una propuesta que recoge obras de maestros del arte plástico pertenecientes a coleccionistas y las expone al público para que todos tengamos acceso a ellas. Como parte de su primer proyecto se presento “La Colección: Se busca a Miguel Pou” recientemente  en las facilidades del Museo de la Historia de Ponce y que  contó con las interpretaciones de los artistas contemporáneos Osvaldo Budet, Diego Romero, Julián Ruiz,  Admin Torres, Cacheila Soto, Jum Martínez y William Maldonado. 

Tanta es la calidad y la significancia cultural que cargan consigo estas interpretaciones, que dos obras de los  artistas participantes del proyecto han sido solicitadas para que formen parte de la Colección de la Oficina de Puerto Rico en el  Congreso de los Estados Unidos.

Eñglish (pronounce it), 10.5" x 10.5", Mixed media on pander, March 2017

Diego Romero, uno de los artistas solicitados, se dejó seducir por el tema del lenguaje como espacio intercultural. El lenguaje precisamente es el "issue"  de quienes emigran, y es de los primeros retos en la asimilación y adaptación cuando su cultura convive dentro de otra cultura predominante. Su obra nos lleva  al despertar de anécdotas sobre la práctica del "difícil"; el "hard struggle" de vivir el Spanglish o, como plasmó Diego, el eñglish.

El otro artista seleccionado fue  Julián Ruiz a través de uno de sus rostros tan característicos de sus exhibiciones, y esta pieza no es la excepción. En esta entrega, Julián presenta a un trabajador de la caña, en referencia a la serie de fotos que tomara Jack Delano en el año 1940. Esa serie de fotos refleja el diario vivir del pueblo puertorriqueño trabajador y los diferentes oficios y profesiones que fueron parte de nuestra fuerza laboral, sobre todo aquellos de la industria azucarera, que fue pilar en el desarrollo de nuestro país.  En su pieza, Julián presenta a un campesino de ojos azules y tez teñida por el sol, que bien pudiera representar a cualquier puertorriqueño de la época.  En la Isla, Delano se convirtió en un pilar del desarrollo de la cultura puertorriqueña, así como contribuyen en otras partes del mundo, sobre todo en Estados Unidos, los millones de puertorriqueños que emigran y hacen de ese país su hogar.

Trabajador de caña de 1940, 24” x 20”, Oleo/Canvas, 2017

Los visitantes en el Congreso se preguntarán cuál es nuestra raza, de dónde vienen los ojos azules de ese trabajador, de qué región de Puerto Rico era, qué es esta cosa redonda que fue utilizada como lienzo, por qué eñglish tiene una ñ… y nuestra historia será conversación. 

Ahora las personas que visitan este edificio, entre ellas muchos puertorriqueños que no viven en la Isla, que recuerdan con cariño y nostalgia la vida puertorriqueña podrán disfrutar de dos piezas que representan a nuestra gente, al pueblo y representan la puertorriqueñidad.

Según la Dra. Gretchelle Dilán, directora del  proyecto “La Colección”, con esta gestión estamos cumpliendo con uno de sus cometidos: exponer arte puertorriqueño en las colecciones públicas y privadas para que el mundo conozca la calidad de nuestros artistas y a través de ello, nuestra historia, nuestra cultura, que se sientan seducidos por nuestros colores y quieran venir a probar nuestros olores, nuestros sabores. El arte en todas sus manifestaciones es nuestra carta de presentación ante el mundo.

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