En vías de perder La Campechada su sentido cultural hacia las artes plásticas



Por  Edwin Velázquez Collazo

En mi carácter personal como artista plástico y gestor cultural con mucho pesar y sorpresa recibí la noticia publicada en un periódico digital del país donde el actual director del Instituto de Cultura Puertorriqueña,  Carlos Ruiz Cortés, señala que el evento multidisciplinario La Campechada  será celebrado en Mayagüez y que este año no será dedicado a una figura o maestro de las artes plásticas puertorriqueñas, sino que será homenajeado nuestro prócer Eugenio María de Hostos (VER NOTICIA). Según el indica la decisión se tomo para descentralizar la actividad cultural del área metropolitana.

Desde su origen y como de costumbre La Campechada  le ha rendido homenaje a la vida y obra de artistas plásticos puertorriqueños(as) de envergadura tales como José Campeche, Francisco Oller, Rafael Tufiño, Myrna Báez, Rafael Ríos Rey y Elizam Escobar. Esta celebración incluye la participación de todas las ramas de las bellas artes desde la música, el teatro, la danza y por supuesto las artes plásticas. Salvo la Trienal Poli/Gráfica de San Juan: América Latina y el Caribe  las artes plásticas puertorriqueñas no tenían otro evento multitudinario a nivel nacional que girara alrededor de esta disciplina artística hasta que llego La Campechada. Tengo que señalar que aunque en las Fiestas de la Calle San Sebastián podemos ver una alta representación de nuestros artistas plásticos la misma no gira alrededor de nuestra disciplina artística.


La Campechada no solo se convirtió en una festividad, sino en la principal actividad multitudinaria que ha ayudado a difundir, promover y educar a nuestra sociedad con relación a las artes plásticas y sus artistas. Convirtiéndose en un excelente proyecto masificador de esta disciplina que impacta a niños y adultos de nuestra sociedad cada año.  Siendo exitoso como evento de gestoría cultural.

La próxima Campechada será dedicada a nuestro prócer Eugenio María de Hostos, el educador de las Américas, aunque reconozco su valía e importancia en el devenir histórico de la sociedad puertorriqueña por sus aportes a la educación esta selección le da un giro a La Campechada y a sus vez le resta no solo al nombre del evento en honor a nuestro primer pintor puertorriqueño José Campeche sino también sentido a su razón de ser.


Entiendo que la figura del prócer Eugenio María de Hostos, junto a las de Ramón Emeterio Betances y Pedro Albizu Campos quizás han sido una de las imágenes más plasmadas  por nuestros artistas plásticos  en diversos medios artísticos como el dibujo, la pintura, el grabado y la escultura. Pero todavía quedan muchos maestros de nuestras artes plásticas para seguir homenajeando y celebrando La Campechada como quizás originalmente se concibió. Entre ellos podemos mencionar a  Antonio Martorrell, Miguel Pou, Osiris Delgado, Olga Albizu, Augusto Marín,Félix Rodríguez Báez, Ramón Frade entre otros, quizás unos más conocidos que otros, pero, sus aportes al desarrollo de las artes plásticas puertorriqueñas han sido señalados por  nuestros historiadores del arte.


Los artistas plásticos puertorriqueños, salvo exponer en  galerías o museos, no tenemos espacios de masificación para presentar nuestros productos artísticos en comparación con los artesanos quienes cuentan con un sinnúmero de ferias artesanales todo el año alrededor de la isla. Me pregunto entonces cuantas ferias, mercados de arte o eventos multitudinarios exclusivamente para las artes plásticas son celebradas en nuestro país cada año. Ya ustedes saben la respuesta! Todos sabemos que muchas ordenanzas municipales no permiten a los artistas plásticos pintar en plazas o lugares públicos a no ser que tengan una licencia como vendedores ambulantes. Se nos obliga a sacar un permiso como artesanos para poder ser invitados a participar en algunas ferias y vender quizás nuestros trabajos si hay espacio disponible. Como clase profesional cultural no estamos recibiendo mucho apoyo del gobierno para desarrollarnos como trabajadores dentro de la industria cultural o creativa y ahora también nos quieren cambiar o quitar el concepto de la Campechada.

Exhorto al Instituto de Cultura Puertorriqueña a reivindicar el sentido cultural de La Campechada  hacia las artes plásticas dedicándole la misma a un maestro de las artes plásticas puertorriqueñas y a su vez continúe como un proyecto masificador de esta disciplina artística. 



Comentarios