Shameful acts, disgraceful episodes, grandiose moments, insignificant achievements and everything in between" de Hector Madera en Espacio 20/20 de Santurce

Foto cortesía de Espacio 20/20


Por Izam R. Zawahra Alejandro

La obra de Héctor Madera parte de un lugar laberíntico donde polos opuestos se entrelazan e inquietudes se convierten en preocupaciones. Su trabajo reciente es una documentación de emociones que celebran pequeñas victorias y grandes decepciones con la misma intensidad.  

En sus obras de gran formato, Madera emplea como soporte rollos de papel normalmente utilizados en la fotografía comercial para crear la ilusión de un fondo sin punto de fuga. El artista no busca el efecto del sin fin, mas bien aprovecha la continuidad que brinda el soporte una vez el mismo cuelga y fluye de techo a piso para crear patrones de figuras abstractas-geométricas e imágenes figurativas. En los patrones geométricos es casi imposible separar forma y color. En parte esa unificación se debe a la utilización de cinta adhesiva en colores neones y metálicos como elemento pictórico principal y esencial en la concepción de las figuras. Esta relación formal, fuerte y directa, junto a la repetición de las figuras, son componentes que aluden a emociones de tensión, ansiedad y desbalance; al mismo tiempo son referencias a jolgorio y celebración. Las formas geométricas, su colores llamativos y la manera en que deslizan por el papel de cierto modo se relacionan al confeti, que a la vez que cae va girando y al dar con luz produce destellos. 



Foto cortesía de Espacio 20/20 (detalle de obra)

En su nuevo cuerpo de trabajo Madera a adoptado como imagen recurrente y adaptado con toda intención la imagen icónica del “Smiley Face” o carita feliz. Las “caritas” de Madera sonríen a la vez que exhiben gestos de tristeza y decepción. Los contrastes de saturación y tono en los colores utilizados en estas caritas tristes-felices aluden a estados mentales distintos pero simultáneamente activos, a altas y bajas, a incertidumbre, emociones comunes que todos hemos experimentado en algún momento, las cuales más allá de hacernos vulnerables, nos hacen humanos. Dentro de los periodos desagradables por los cuales todos pasamos siempre encontramos momentos de felicidad. Estas “caritas” son un tipo de homenaje a esos respiros. Madera deja todo en la obra, nos recuerda que no hay mal que dure 100 años ni cuerpo que lo aguante, pero que el soporte pictórico(el papel), sí aguanta todo. 


El gran tamaño de las obras, el sobre trabajar la composición y la paleta de colores en tonalidades altas son características del trabajo de Madera que guardan una innegable relación con el exceso. La manifestación del exceso hace conexión inmediata a la palpable lujuria en los dibujo digitales que el artista imprime sobre textiles y luego convierte en cojines de distintos tamaños. Bailarinas exóticas de cuerpos voluptuosos, semi-desnudas, en posturas sexuales con zapatos y tatuajes que coquetean con la sensualidad, son algunas de las imágenes visibles en estas estampas. El dibujo en combinación con los colores crean un efecto psicodélico y alucinante, como el que estamos acostumbrados a ver en películas de Hollywood. La lujuria y el exceso van de la mano del desorden, efecto creado por el uso y la constante “reorganización” de estos cojines por parte de los espectadores. Estos cojines guardan un estrecho vínculo con la extraña comodidad que sentimos en momentos de descontrol y en ocasiones decidimos perpetuar. 



Foto cortesía de Espacio 20/20 

Madera no solo utiliza el papel y la cinta adhesiva como elemento de color si no también como medios para crear una obra tridimensional. El artista cubre globos llenos de aire con la colorida cinta para luego desinflar los mismos. El resultado de este proceso culmina en figuras orgánicas comprimidas y corrugadas que Madera luego coloca sobre pedestales. El artista concibe esculturas similares mediante dobleces y compresiones del mismo tipo de papel que emplea como soporte para sus pinturas. La compresión de los materiales sugiere auto-sabotaje y desecho de ideas, aspectos comunes en los bloqueos creativos que los artistas sufren de manera temporera en distintos periodos de sus carreras. Todos estamos familiarizados con la imagen del artista frustrado que al nos estar complacido con su trabajo convierte el mismo en una bola de papel y la tira al piso. Madera coloca estas frustraciones en un pedestal, le da valor e importancia. El artista identifica al error que todos hemos cometido en buscar resultados diferentes repitiendo los mismos procesos amargos y los transforma en objetos artísticos. 

El trabajo de Héctor Madera es tan íntimo como universal. Estas obras nos llevan a repensar los puntos de vista que adoptamos en ciertos momentos y a reconocer oportunidades en el “in-between” de episodios volátiles. Nos llevan a reconsiderar la importancia y lo efímero del triunfo y el mérito obtenido. Esto es posible gracias a la fluidez con la que el artista concreta el proceso de transformar pensamientos en obras y el dominio de medio e imagen para no abandonar la intencionalidad. 

La exhibición "Shameful acts, disgraceful episodes, grandiose moments, insignificant achievements and everything in between" del artista Hector Madera se estara presentado desde el  Viernes 8 de Mayo de 2015  cuando será la noche inaugural de la misma de 7 a 11pm.en el Espacio 20/20 que está localizado en el #624 de la Calle Cerra en Santurce, entrando por la Ave. Ponce de León. Para más información y horarios llamar 787-967-9310 / 787-400-059.

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